Parálisis del sueño

Dormir: Estar en aquel reposo que consiste en la inacción o suspensión de los sentidos y de todo movimiento voluntario.

Soñar: Representarse en la fantasía imágenes o sucesos mientras se duerme.

¿Y si te encuentras a medio camino de esas fases?, ¿cómo se llama?

Siempre que cuento mis experiencias oníricas, con pesadillas extrañas y una parálisis del cuerpo, pero mi mente en movimiento. La gente alucina. Aunque hay otras personas, que me confiesan haber sentido alguna vez lo mismo que yo.

Me he dado cuenta que esa fase en la que mi mente despierta y soy incapaz de despertar mi cuerpo a la par, han sido fruto de nervios, agobio y ansiedad. Una vez que me he librado de el problema que me molesta, no me vuelve a pasar. Sin embargo, cuando empieza a preocuparme algo, la fase de parálisis del sueño, aparece.

En ese estado, se tiene dificultad para respirar, uno es consciente de lo que ocurre a su alrededor, se sufren más pesadillas y todo como si fuera excesivamente más real que un sueño de por sí. Se está dormido y despierto a la vez, la persona que lo sufre, es consciente de su situación y de ahí, que se desespere si no es capaz de controlarlo. Dicen que este «Trastorno del sueño» es hereditario. Lo curioso es que mi madre dice, que solo le pasaba estando embarazada de mí.

De todas formas, nunca he sido capaz de controlarlo. Podía escuchar a todos a mi alrededor, la tele de fondo, el cojín en mi cara asfixiándome y lo único a lo que he llegado a hacer son unos ruidos extraños, que solo causan la risa a los que me escuchan, sin saber que en realidad, estoy pidiendo que me despierten.

Mucha gente tiene la teoría de que, cuando esto ocurre, es porque se tiene un viaje astral y cuando estás en esa fase, es el final del viaje. Eres consciente de tu vuelta, pero no del viaje. Teorías y teorías.

El caso es que si alguna vez os pasa…relajaros y volved a dormir, de esa forma, uno puede volver en sí normalmente.

Cucarachas

Se acercaba a mí arrastrando sus asquerosas y sucias patas de color amarillento. Su hedor tan repugnante como ella. Sus antenas tan largas y su aspecto aplastado, y seguía acercándose a mi. Y me pareció verla crecer. La cucaracha que me amenazaba, había aumentado en tamaño, y detrás de ella, en hilera, muchas más, todas igual de repugnantes, con sus antenas en mi dirección y sus patas dándose más y más prisa. Las veía venir como un ejército horripilante, y entonces te vi. Allí estabas tú con una sonrisa de oreja a oreja, abriendo una caja, de donde todos esos horribles insectos clonados salían hacia a mi.

Y entonces, sacando fuerzas ante tal espectro de sucias cucarachas, luché, pisándolas una a una, a pesar de que cada vez fueran más y más grandes. No tenia miedo y el asco se estaba convirtiendo en rabia, las pisaba, las pisaba…

Desperté con picor en el cuerpo, inspeccionando cada resquicio de mi pulcra cama…Ni una de ellas, ni tu risa malvada…solo una pesadilla…